Ayer fuimos a ver la obra de Aldo. El teatro era pequeño pero adecuado, no era incómodo, y estábamos cerca del escenario.
Casi llego tarde, pero estuve a tiempo. Allí me encontré ya a Silvia, Verónica (& co.), Carolina y Marisa que me esperaban. Precisamente en ese instante hacían ingresar al público...
La obra estuvo muy bien. El personaje que Aldo interpretaba, en particular, tenía un rango emocional muy amplio y nuestro amigo se lució. Pero no voy a contar nada más, así que los que no hayan ido a verlo, vayan ya :-)
El fin de la noche estuvo salpicado de historias del presente, remembranzas del pasado, recuerdo de los compañeros extraviados, actualización de noticias y especulaciones sobre el futuro. Lo habitual cuando nos reunimos, bah.
Queremos más. A ver cuándo nos reunimos de nuevo, con la excusa que sea...
No hay comentarios.:
Publicar un comentario